martes, 11 de enero de 2011

¿Qué quiere Perón de la Educación Física?

Autor: Profesor Mario Valentín Mamonde. (Universidad Nacional de La Plata)
Email: mariovalentinm@hotmail.com

En esta ponencia quiero dejar presentado un sentido posible para pensar en torno al efecto de las palabras que en forma de discursos operan sobre las prácticas que todos los días de nuestra vida hacemos y hacemos hacer en el patio, la cancha, el playón, el polideportivo, el club y en todos los lugares en los que trabajamos. A éste efecto discursivo le denominaremos “eficacia simbólica”[1] del discurso.
La tarea de esta presentación trata de mostrar la construcción de discursos que forman parte de lo que el psicoanálisis ha definido como inconsciente y que como trataré de mostrar forma parte, aunque no lo sepamos la mayoría de las veces de, nuestras propias prácticas docentes.
Para realizar esta tarea analítica recurrimos a la noción lacaniana de Discurso Amo por la cual “los esclavos se ponen a trabajar”. El discurso elegido en este caso es el de Juan Domingo Perón hablándole a los profesores del INEF de San Fernando pronunciado el 12-11-1954 El análisis discursivo pretende mostrar algunas respuestas explicitas en el discurso político pero además mostrar algunas respuestas implícitas. Esta tarea es parte de un trabajo mas amplio que se viene desplegando para realizar una tesis de postgrado en la Maestría en Educación Corporal en la UNLP.

Palabras   Claves   :   POLÍTICAS   DEPORTIVAS-ANALISIS   DEL   DISCURSO
POLITICO-EFICACIA SIMBOLICA-PSICOANALISIS.



Para empezar, voy a mostrar una serie de discursos que he seleccionado para poder cumplir con el propósito de dar cuenta de una categoría discursiva que llamaremos DISCURSO DE PERON.

Serie de discursos recopilados: Discurso de J. D. Perón a los profesores del INEF de San Fernando pronunciado el 12-11-1954.

1.  “...tenemos un exceso de hombres capacitados para concebir, pero carencia de hombres para producir, para crear y para realizar....ese es el fenómeno, ese es problema más fundamental de nuestro proceso educacional.........”

2.   “........la humanidad sufre de un proceso de tecnificación. Es decir que la enseñanza, que fue siempre un proceso humanista, se ha ido convirtiendo, paulatinamente, en un proceso técnico; se ha deshumanizado a fuerza de un exceso de tecnificación......es necesario cargar las tintas sobre el humanismo educacional......”

3.    “...lo que nosotros queremos conseguir es un ente equilibrado que disponga de una inteligencia vivaz y profunda y de, un alma buena, sostenido por un cuerpo sano y vigoroso...”

4.   “...nosotros hemos venido haciendo profesores de ejercicios físicos que después no tenían nada que hacer en la escuela argentina. Esa es la realidad.”

5.  “...el  profesor  es  una  persona  que  aunque  tenga  entusiasmo  y  decisión, aunque comprenda que es un profesional de esa clase de enseñanza, no tiene posibilidad ni tampoco responsabilidad, porque no califica ni clasifica.

6.   “...el profesor ha de ponerse en la mentalidad del niño, no en la suya propia...”

7.  “...los profesores deben tener libertad de acción para enseñar....por ejemplo: en gimnasia debe haber ejercicios para cada uno...”

8.  “...hay que hacer una gimnasia argentina para los argentinos...”

9.  “...la gimnasia es un complemento del deporte y no es formativa...”

10.   “...vamos a buscar que todas nuestras escuelas tengan la posibilidad de disponer de un lugar donde el chico vaya a desarrollar su actividad libremente, bajo la vigilancia, el control y el consejo de los profesores de EF...”

11.    “...yo quiero alcanzar pronto esos 5 millones de deportistas, buenos o malos, fuertes o no, pero que hagan deportes...eso es lo que me interesa...”

12.  “...hemos contratado 17 técnicos alemanes...”

13. “Yo les pido: no descansen hasta conseguir eso, pongan dedicación, su capacidad y toda su tenacidad.

Metodología de Análisis de los discursos

El tema del que voy a tratar, como se desprende del título, es el referido a las técnicas cualitativas de análisis del discurso que estoy empleando como herramientas de trabajo en la construcción de mi tesis de maestría. Ahora bien, antes de empezar a desarrollarlo debo hacer dos aclaraciones iniciales: una está dirigida a explicitar qué concibo como técnicas de análisis, y la otra alude a las implicaciones metodológicas que -en mi opinión- tiene la distinción entre las diferentes dimensiones del habla. Con respecto a lo primero, considero que las técnicas de análisis no son senderos, al menos no son senderos neutrales, por los cuales el investigador se aproxima o se acerca a una determinada faceta del discurso que estuviera ya dada en él, sino que es más apropiado concebirlas como herramientas -herramientas de carácter conceptual- que lo descomponen haciendo que surja, que se constituya en él, que se evidencie de un modo u otro esa faceta que buscamos estudiar.
La segunda puntualización es que, para hablar de esas técnicas, voy a acudir a la propuesta analítica de la lingüística ¿por qué acudir a ésta y no otras?. Los motivos que me han movido a ello son varios, y entre ellos voy a destacar los siguientes:
En primer lugar, la propuesta de la lingüística puede ser considerada como una relación sistemática de los aspectos del discurso en los que el analista debe fijarse, admitiendo en su seno -en mi opinión- el uso de técnicas diferentes para el análisis de cada uno de esos aspectos. Y como tal esquema expositivo lo voy a utilizar, insertando en él las aportaciones que, en este ámbito, han hecho desde el psicoanálisis S. Freud y J. Lacan.
En segundo lugar, es la propuesta analítica de la lingüística -entre las pocas aún, que yo conozco (claro está)- que exige tomar en consideración un mayor número de aspectos, y muy diversos, del material discursivo, que exige abordarlo desde muchas de sus facetas. En concreto, pide que se preste atención a sus estructuras elementales (tanto manifiestas como latentes), a los argumentos que esgrime, a las figuras literarias o, para mencionar una sola cosa más, a los símbolos y los valores a los que apela. Sin duda, estos aspectos han sido ya señalados por otros autores como significativos para el análisis, pero lo interesante de la propuesta no es su originalidad o falta de originalidad, sino -como he dicho- la sistematicidad y la amplitud de miras que exige al investigador.
En tercer lugar, es una propuesta analítica, en cuanto no olvida encaminar la mirada -como después veremos- hacia la relación del discurso con el contexto en que se produce.
En cuarto lugar, hay que destacar su aplicabilidad a escala interdisciplinar, lo que es congruente con el afán interdisciplinar que estuvo en su origen. De hecho, no sólo Freud sino especialmente Lacan lo que hicieron fue integrar en un solo corpus teórico-metodológico el legado de diferentes disciplinas y corrientes de pensamiento; entre ellas, por supuesto, el psicoanálisis (en especial, en lo que se refiere a su teoría del síntoma), la lingüística estructural de Saussure y Jakobson, la retórica clásica, que le lleva a conceder un papel fundamental al contexto interaccional en que se enuncia el discurso.
Por último, estimo que la propuesta del Psicoanálisis es especialmente adecuada para el análisis de la 'eficacia simbólica', de la dimensión performativa del discurso. Si es verdad -como se puede afirmar - que todos los esfuerzos por hallar el principio de la eficacia simbólica, están y estarán condenados al fracaso mientras no establezcan la relación entre las propiedades internas del discurso, las propiedades de quien lo pronuncia y las propiedades del contexto en que es pronunciado, entonces, el esquema de análisis brindado por Lacan es, como he señalado, uno de los más idóneos para el estudio de esa eficacia simbólica, puesto que los diferentes niveles de análisis que propone tienen como propósito justamente conocer todas esas propiedades y las relaciones entre ellas.

3. Hipótesis de trabajo

Para orientar metodológicamente nuestro análisis de la eficacia simbólica del discurso peronista voy a poner a funcionar dos hipótesis de trabajo que provienen del psicoanálisis en relación a la cuestión de “La Política”.
La primera la tomamos de Sigmund Freud:

3.1. “Los hijos se alían para hacer del Padre lo sagrado a lo que se le debe obediencia.......”

La segunda la tomamos de Jaques Lacan:

3.2. “Los modos de aglutinación política ya no reúnen a individuos en masas convencionales en torno a un líder en posición de ideal del yo, sino a individuos orgullosos de una individualidad comulgando en un mismo goce en torno a un objeto parcial, que difiere sin duda de una comunidad a otra.”

4. Categorías analíticas halladas

Siguiendo con la hipótesis freudiana podemos puntuar al menos alguna posibilidad de fuerza explicativa:

Hipótesis 1

4.1.1. En los comienzos, el peronismo se aglutinó alrededor de un líder, Perón. Se lo puede ver a Perón practicando box, esgrima, esquí, manejando una moto, era un deportista. A Menem se lo puede ver haciéndose armar un partido de futbol, básquet o golf, pero que los demás jueguen para que él pueda ganar. Es un político del deporte. A Duhalde se le reconoce como guardavidas, su profesión es la de abogado, y su equipo de fútbol es Bandfield y le gusta la pesca de tiburones, es un muy buen espectador del deporte. Es un político.

4.1.2.  Al menos en lo que hace al diseño de políticas deportivas el nombre de Perón sigue siendo la figura “sagrada” a partir de los 70.

4.1.3.  Sólo a mediados de los 90 a través del discurso de Menem y Duhalde se observa una falta del nombre de Perón.

Hipótesis 2

4.2.1 en relación al aglutinamiento podemos advertir que las políticas deportivas ya no tienen la posibilidad ni la intención de ser un movimiento de masas sino solo a una población en particular, la de la provincia de Bs.As.

4.2.2.  de manera fuerte se advierte la cuestión del orgullo individual, especialmente en relación a la posibilidad de ganar un torneo provincial para ser representante no del país sino de una provincia aún más, de una ciudad.
4.2.3.  se observa que ni Menem, ni Duhalde se ocuparon de ponerse en el lugar del Líder al menos en materia de políticas deportivas.

Para Lacan “.......la política consiste en negociar, y esta vez al por mayor, por paquetes, a los mismos sujetos, llamados ciudadanos, por cientos por miles.......”
En la versión de Perón encontramos que tal como lo expresa Lacan:”...el poder
político es androcéntrico.......”

Aportes y Consideraciones

Para Lacan el discurso de la política es el DISCURSO AMO y lo define precisamente el revés del psicoanálisis, ese discurso se juega del lado de la identificación originaria con el padre y de lo reprimido originario, lo que queda afuera de ese discurso es la vida de los esclavos. Aquí podemos pensar preguntándonos ¿qué nos queda a los profes que repetimos irreflexivamente la propuesta de una política del deporte? ¿Qué queda para los jóvenes?
Interpretar no es volver adecuado un síntoma o un sueño, con un enunciado inconsciente. Lacan intenta sacar al psicoanálisis de ese callejón sin salida que lo torna inadecuado por buscar adecuación, redundando ello en la producción de pacientes tan imaginativos como seriados. No se trata de darle un sentido, de explicarle al analizando por qué la vida lo vuelve siempre a engañar. No se trata de darle de comer sentido al síntoma, dice Lacan, sino más bien de hacer explotar ese sentido que como síntoma se sostiene en lo real.
Lacan leyó mucho a Hegel y hoy podemos comprender no solo como opera el Discurso Amo (devenido en discurso biomédico o psicomotricista o deportivista) en la Educación Física sino además que en realidad el saber del Amo es el saber del esclavo apropiado por el Amo, es decir lo que no sabemos en realidad, no sabemos que nuestro saber es el saber de los que dicen saber como amos de la política deportiva y todo este mejunje es Hegel en la Dialéctica del Amo y del Esclavo entonces aquella vieja lógica del Paidotriba y el Gimnastes de la Grecia Clásica no era otra cosa que la relación Amo- Esclavo solo que la podemos volver a situar en la década de los 90.

Sobre el Discurso Amo.

En Kojeve, la dialéctica del amo y del esclavo es el resultado inevitable del hecho de que el deseo humano es deseo de reconocimiento, el sujeto debe imponer a otro la idea que el tiene de sí mismo. Pero, puesto que este otro también desea reconocimiento, tiene que hacer lo mismo, y por lo tanto el sujeto se ve obligado a entrar en lucha con él. Esta lucha por el reconocimiento, por “puro prestigio” tiene que ser una “lucha a muerte”, puesto que sólo arriesgando su vida por la única razón del reconocimiento sólo puede ser otorgado por un ser vivo. De modo que termina cuando uno de los dos renuncia a su deseo de reconocimiento y se rinde al otro; el conquistado reconoce al victorioso como su “amo”, y se convierte en su “esclavo”. De hecho, la sociedad humana sólo es posible porque algunos seres humanos aceptan ser esclavos en lugar de luchar hasta la muerte; una comunidad de amos sería imposible.
Después de lograr la victoria, el amo, pone al esclavo a trabajar para él. El esclavo trabaja transformando la naturaleza para que el amo pueda consumirla y disfrutarla. Pero la victoria no es tan absoluta como lo parece; la relación entre el esclavo y el amo es dialéctica, porque lleva a la negación de sus respectivas posiciones. Por un lado, el reconocimiento logrado por el amo es insatisfactorio, ya que no es otro hombre quien se lo otorga sino sólo un esclavo, que para el amo es sólo una cosa o un animal; por tanto, “el hombre que se comporta como un amo nunca estará satisfecho”. Por otro lado, el esclavo es parcialmente compensado por su derrota por el hecho de que, trabajando se eleva por sobre la naturaleza transformándola en algo distinto de lo que era. En el proceso de cambiar el mundo, el esclavo se cambia a sí mismo y se convierte en el autor de su propio destino, a diferencia del amo, que solo cambia a través de la mediación del trabajo del esclavo.
El desenlace de ésta dialéctica es paradójico. El amo termina insatisfecho mientras que el esclavo queda satisfecho.
Lacan recoge esto en su teorización del Discurso Amo. En la formulación de ese discurso, el amo es el significante amo (S1), que pone a trabajar al esclavo (S2) para que produzca un excedente o plusvalía (a) de la que el primero pueda apropiarse. El significante amo es lo que representa a un sujeto para todos los otros significantes; el discurso del amo es entonces un intento de totalización.
No obstante, este intento siempre fracasa porque el significante amo nunca puede representar al sujeto completamente; siempre hay algún excedente que escapa a la representación.
La metáfora forma parte de nuestra forma de pensar, de entender el mundo. Es un fenómeno social y creativo, al igual que el habla. En ocasiones, se naturaliza y perdemos la noción de que estamos usando una metáfora: el deporte es una escuela de vida.....mens sana in corpore sano...
En la metáfora hay dos planos o términos: el real (deporte) y el evocado o imaginario (escuela de vida). Hay, pues, una relación de similitud entre los dos términos.
La praxis a la que apelamos desde el psicoanálisis nos permite reconocer la lógica del inconsciente en la aparición del imprevisto, del inexplicable que se convierten en modalidades de la transmisión que debe elaborarse e inscribir en el transcurso. A condición de que la palabra se convierta en la herramienta de localización, depositando en rastro y en hueco, pistas o huellas para nuestro investigar (en latín investigare es ir tras las huellas) los resultados de una experiencia centrada por la falta, reseñando del camino recorrido, por palabras particulares.
Tenemos varios ejemplos de los efectos de la intervención sobre la proyección subjetiva de cada uno de los discursos analizados.
Solo mostramos algunos ejemplos en boca de Perón referente de las políticas deportivas peronistas que dan prueba de la importancia de la palabra, de la eficacia simbólica, otra vez, como medio de simbolizar el real al cual se enfrenta un político en su acto enunciativo, pero hay que advertir que también algo nos toca a los profesores en nuestras prácticas cotidianas, un real siempre singular. El real para el psicoanálisis sería lo que nos toca, Lacan lo define así: "como esto que hace límite a la representación, límite a esto que es posible imaginar, o nombrar, este contra lo que él tropiece ", real es una figura del imposible (lo que es traumático para un tema, lo que no llega a aceptar, o a soportar)." En nuestro estudio el Real es la existencia de políticas deportivas. Nos gusten o no nos gusten. Seamos afiliados políticamente o no .Nos creamos políticos o apolíticos. El intento de leer a Freud, leer a Lacan, no es sin consecuencias. Son textos de goce, textos que conmueven, que mueven a producir con otros. Alea jacta est.[2]

Bibliografía consultada:

Discurso de J. D. Perón a los profesores del INEF de San Fernando pronunciado el 12-11-1954.
LACAN, J: “Seminario 17.El reverso del psicoanálisis”.Bs.As, Paidós, 1992.
LACAN, J: “Seminario 11.Los cuatro conceptos del psicoanálisis”. Bs.As. Paidos. 1995. 7º reimp.
LACAN, J: “Seminario 4.” La relación de objeto”, Bs.As, Piados. 1996.
ALBANO, S; LEVIT, A; GARDNER, H: “Glosario de términos lacanianos”. Bs.As. Editorial Quadrata.2005.
ZASKA, Y. C. (Dir.): “Jaques Lacan. Psicoanálisis y política”. Colección Claves. 2004.


[1] Lacan habla de la eficacia desde su texto sobre el estadio del espejo, en el cual se refiere a la eficacia de la señal. Debemos recordar la experiencia de la etología mencionada por Lacan: se le muestra a un animal una figura de un animal de su especie, lo que provoca como respuesta, el desencadenamiento de la conducta de "cortejo". Se trata de la eficacia de la imagen como señal. Lacan habla, en El estadio del espejo, de la eficacia de la imagen en la constitución de un yo corporal.
Esto debe ponerse en contrapunto con lo que constituiría un momento decisivo de la enseñanza de Lacan: su descubrimiento de la eficacia simbólica. Digo "descubre" porque el término eficacia simbólica no es propiamente de Lacan, es de Levi Strauss. Se trata más específicamente del título de un libro de Levi Strauss, La eficacia simbólica, en el cual él describe básicamente los efectos de acción del chamán sobre el cuerpo del enfermo. El mito es la causa eficiente en la práctica chamánistica. Esto prueba, dice Lacan con ironía en Televisión, que "una práctica no necesita ser esclarecida para operar". Es decir: es posible operar con la palabra sin tener la menor idea de lo que se está haciendo.
[2] La suerte está echada.